En ocasiones llorar.

Las cosas empeoraron aun mas, la hermana Eduviges, Teresa y Tita se habian sumido tambien en la tristeza. Reunieron a las 5 hermanas en la capilla donde ademas de las velas encendidas, prendieron ocote, mirra menta y cebada. El aroma era fuerte pero ni aun asi consiguieron reaccionar; quedaron las 5 con sus ojos negros clavando la mirada al piso.

A Vlauye lo llevaron a la habitacion de la hermana Maura. Sobre la cama pusieron su mullido almohadon y en pocitos garbanzos, pepitas y una chaparrita de pina, pero ni aun Tin tan, lograba distraer a Vlauye de lo que pasaba en el Convento. Al cabo de una hora entro la hermana Maura, arrimo la silla de madera junto a la cama y quedo mirando la tele, pronto los agobios de Vlauye desaparecieron al escucharla reir. Arnulfo por su parte relamia un huesito que Malena regalo, Indigo en cambio regreso al pueblo para ver cuanto ocurria. Al terminar la pelicula Vlauye estiro sus bracitos y levanto de un solo salto, pretendia cantar y bailar como el pachuco, pero al ver los ojos de la hermana Maura quedo helado, volvia a suceder... la hermana Maura se hundia en el silencio.

Vlauye sintio miedo, tomo el cuaderno y trepo al lomo de Arnulfo, que como rayo corrio a esconderse bajo el tinaco. Una vez ahi, comenzo a llorar. Sentia que algo debia hacer, pero no sabia que.

-"Vlauye -Se levanto, pelo los dientes y seco sus lagrimas, era la Madre Augusta hincada frente a el- No sientas pena por llorar, es la forma que tiene el corazon para ser lavado, desmanchalo de miedos. Enjuaga tu corazon para no olvidar que late dentro. Llora para que tus ojos vean con mas claridad, para que tu risa se escuche fuerte, para decidir el camino que vas a tomar -Vlauye se acerco a la Madre Augusta, ella lo recibio entre sus manos y comenzo a acariciar- Hace 15 anos, mariposas de todos colores llegaron al porton, entre ellas jugaba Malena, al verla supe que algo muy especial habria de suceder; anos despues llegaste tu. Te amo tanto como ella y no dejare que nada te suceda. No se quien eres aun, ni a que hayas venido, pero si este es tu destino, enfrentale con valor."

Luego de un beso en la frente, la Madre Augusta coloco de vuelta al pequeno Vlauye sobre el suelo, y partio hacia la capilla. El pequeno cuaderno cayo de par en par, el viento sacudio las hojas, y en alguna de ellas se escribio:

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CUMPLE TU DESTINO...
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